Diario MarínMarín, una localidad que según el Instituto Nacional de Estadística, cuenta con 24.362 habitantes, está muy presente en toda la novela El Pazo de Lourizán. De hecho, la novela se divide en tres partes: la primera narrada en segunda persona y cuya protagonista es la pequeña Lúa. La segunda escrita en tercera persona en la que cuenta la vida de Xoana Palacios y la tercera narrada en primera persona por la misma Lúa ya de joven. En todas ellas, aparece Marín.
En la primera parte, la imagen del pueblo es evocadora de una infancia feliz. Lúa, la pequeña protagonista de la historia cuenta sus vacaciones y sus recuerdos: «Llegar a Marín significaba mucho más que ir a la playa de Portocelo. Representaba la posibilidad de palpar y asir la completa y ansiada libertad. Saborear y mezclar las gotas saladas del océano con el aroma a menta del eucalipto recién plantado. Disfrutar de un éxtasis sensorial. Nada más pisar la arena y despojarte de la vestimenta, respirabas hondo, alzabas los brazos y salías corriendo hacia la orilla con aquel trikini de flores rosas mientras ibas moviendo de un lado a otro la cola de caballo», se expone en la novela.
Allí vive también su «Madrinita». Y se desarrolla la historia de Los Carballo, una poderosa familia industrial gallega que pasa de vivir de alquiler en el Pazo de Lourizán para hacerlo en el centro de la localidad. En el texto de la tercera parte aparecen continuas referencias a sus calles y casas: «También están decididos a trasladar la Escuela Naval de Cádiz aquí, a Marín. Así que no tenemos más remedio que comprar una casa cuanto antes en el pueblo. A mí me gustaría adquirir algo no muy lejos del puerto para no tardar demasiado en vigilar los barcos y las transacciones de la lonja. Había pensado en la casona de la Calle Sol con Calvo Sotelo. ¿Qué te parece, hijo?».
Por último, en la tercera parte de la novela, el detective Fraser encontrará en las callejuelas de la localidad respuesta a sus pesquisas: «Encontró dos cartas, ambas provenían de la emblemática residencia donde vivían los Carballo-Saraiva tras desprenderse de la Casa Briz. Se trataba de la antigua casona, una de las de mayor solera de Marín, que hacía esquina con la Praza do Reloxio y la bajada a la Veiguiña». Se podría, incluso, afirmar que El Pazo de Lourizán es una novela marinense, sin embargo, también se ofrecen otras ubicaciones entre ellas la más importante Lourizán y Placeres, ambas de Pontevedra, pero también la propia ciudad de Pontevedra, A Coruña y lugares de Andalucía como Paymogo (Huelva), Navamorcuende (Toledo), Villalpando (Zamora) y Mora de Rubielos (Teruel), lugares emblemáticos de la infancia de la pequeña Lúa.
