Lola Fernández
El nuevo Lago Castiñeiras resurge como uno de los entornos sostenibles más bellos y especiales de Marín. El Ayuntamiento ha decidido avanzar los primeros detalles del proyecto para poner en valor la zona y ha reconocido que se actuará tanto en el acceso al Lago para conseguir convertirlo en un enclave de recreo y visita como dentro del mismo recinto. Entre las novedades anunciadas destaca un parking específico y una especie de auditorio de piedra con graderío para aprovechar la pendiente natural.
Al mismo tiempo y en un área muy próxima al lago se habilitará un espacio con mesas y bancos que sirvan de esparcimiento y descanso a quienes lo visitan.
La ejecución del nuevo Lago Castiñeiras se realizará a través dos proyectos incluidos en el plan de sostenibilidad turística, dotado con dos millones de euros procedentes de los Fondos Europeos-Next Generation.
Para María Ramallo, Alcaldesa de Marín, «la actuación se centrará, sobre todo, en la reordenación del acceso y del espacido colindante al propio plago, que en la actualidad está muy ocupado por vehículos y no ayuda a disfrutar del enclave».
Itinerarios para peatones
Por todo ello, se actuará en distintas zonas, teniendo en cuenta la mejora de la accesibilidad y la creación de itinerarios seguros para los peatones. De hecho, una de las áreas será delante del propio lago, donde se crearán dos zonas separadas por un murete de piedra en el que las personas podrán sentarse a descansar y que servirá como protección frente al tráfico.
A su vez, el pavimiento de la zona peatonal se diferenciará de la carretera y dará continuidad a los senderos. También se mejorará el pavimento del paseo delante del lago y se instalarán bancos en la zona central.
Con ello, toda la subida entre el lago y el parking se convertirá en un agradable sendero con espacio separado para peatones y tráfico rodado.
