El Concello de Marín ha decidido utilizar los recursos públicos del Departamento de Comunicación para promocionar negocios privados, un asunto que debería estar prohibido por ley a no ser que se pudiera promocionar de manera gratuita a todas las empresas sin excepción del municipio, todos los restaurantes, todos los comercios y los servicios que existen en el municipio, desde un pequeño centro de psicología a una peluquería.
Desconozco si esto está prohibido o no, pero conste que jamás ha llegado nunca a esta redacción una nota de prensa del gobierno regional o central anunciando un nuevo servicio de éste o aquel restaurante, o de este comercio, porque no habría periodistas en el mundo para dar tal cobertura desde el Departamento de Comunicación de la Xunta o de Pedro Sánchez. Hay que entender que el Concello representa a todos los marinenses, no sólo a los votantes del PP, que actualmente gobierna. Igual que el presidente de la Xunta es de todos los gallegos y Pedro Sánchez es el presidente de todos los españoles.
De la misma manera, María Ramallo es la Alcaldesa de todos los marinenses. Una figura institucional muy importante, por eso resulta feo primar a unos frente a otros, a no ser que a partir de ahora empiece a lanzar notas de prensa de todos los menús diarios y cambios que puedan reflejar todo el negocio de la restauración en Marín. O de todos los escaparates cuando venga la nueva moda de Primavera, o de todas las peluquerías que oferten un servicio diferente. O porqué no, de todas las inmobiliarias cada vez que vendan un nuevo inmueble, o de todos las gestorías, gabinetes de psicología, escuelas, podólogos, dentistas, etc
Muy bonito no es. Digámoslo así y tampoco se trata de su cometido. Un ayuntamiento debe de informar de todo lo que trate en su Concello, ser transparente y garante de una información sólida y contrastada. El departamento de comunicación tiene una tarea de mayor altura, que todos deberíamos respetar y valorar. No es una agencia de comunicación subcontratada. No es es eso. Es mucho más. ¿Deberían los medios de comunicación en Marín y resto de Galicia seguirle el juego? Desde el punto de vista de Diario Marín, no. No deberían prestarse a ello.

