Silvia Rodríguez Coladas
Juan Manuel Quelle -escritor, profesor, conferenciante y maestro en psicología positiva- se convirtió en una reciente charla en el Café Moderno de Pontevedra en el impulsor de una corriente de energía positiva que invadió el encuentro Café para el alma organizado por Sefi Gondar, propietaria de Peluquería Cacharela en la misma ciudad. Desde allí, se ofrecieron conceptos e información científica para mejorar las reacciones ante las adversidades y los vaivenes de la vida.
Quelle contó que los seres humanos no somos seres racionales, sino emocionales que razonan. En el comportamiento humano, primero entra en juego la emoción y después el raciocinio. «Tenemos que hacer un esfuerzo por nuestra cuenta para encontrar la felicidad ya que la mente está diseñada para la supervivencia, para protegernos, no para ser felices. Por eso, surgen las preocupaciones, porque nuestro cerebro siempre se pone en el peor escenario posible», explica el profesor.
Palabras que ayudan
Para Juan Manuel Quelle, las palabras, las frases ayudan y se convierten en «mantras», en inspiraciones que sirven para provocar sensaciones positivas. Destaca algunas de sus preferidas:
- El optimismo es el perfume de la vida. Todos eligen a los que huelen bien.
- En ciencia, se habla de el «efecto heliotrópico», cuyo ejemplo más evidente es el de los girasoles que buscan el sol y que puede trasladarse a la afirmación de que los seres vivos buscan la luz y las fuentes de energía positiva.
- Las personas de éxito -no de dinero- son siempre personas positivas. Tener carisma es tener la posibilidad de generar entornos positivos.
- Ser positivo es algo bueno para la salud, ya que el noventa y ocho por ciento de las enfermedades tienen un principio psicosomático.
En la búsqueda de una respuesta sobre lo que es la psicología positiva que Quelle enseña, asegura que se trata de «un complemento de la psicología clínica. La principal diferencia es que la psicología clínica puede sanar cualquier patología que genere falta de bienestar o falta de felicidad pero no es capaz de generar estados de bienestar. La psicología positiva complementa esa parte, generando intervenciones basadas en patrones científicos que generan esos estados. Por eso es conocida también como «la ciencia de la felicidad”.
Por decirlo de otra manera más práctica, «habría que imaginar un eje horizontal en el que en un extremo colocaríamos un -10 y en el otro un +10, situando el 0 en el centro. La psicología clínica se ocuparía del espacio entre el -10 y 0 y la positiva entre el 0 y el +10», añade.
La buena noticia es que existen pautas capaces de modificar esta tendencia ancestral de la mente porque, como dice Juan Manuel Quelle, la Ley de Murphy es una engañifa: «está comprobado que existe un 2% más de probabilidad de que las cosas que pueden salir bien salgan bien y no mal». Y es que, a todo en la vida se le puede dar una vuelta con lo cual, la clave es cambiar la emoción que nos provoca. Y si no se puede cambiar, el camino correcto es aceptarla.
Ejemplos para conseguir el cambio
¿Cómo? Reprogramando con algunos métodos, entre ellos, Juan Manuel Quelle, sugirió a la audiencia algunos ejemplos:
Reprogramando nuestra mente. No vemos la vida como realmente es, sino como la percibimos nosotros, por eso no hay dos realidades iguales. Por ello, la empatía –nos dice nuestro ponente– no es ponerse en lugar del otro, algo que resulta pues de todo imposible, sino entender que el otro es diferente y respetarle sin juzgarle. No tenemos que tener las mismas ideas pero sí podemos respetarlas. Ante todo, debemos huir de las creencias limitantes que nos condicionan: juicios que proceden de nuestro pasado y que nos llevan a no dudar sobre si podemos o no hacer algo, impidiéndonos intentar averiguarlo. Se arraigan en nuestro subconsciente y no hay manera de quitárselas de encima, impidiéndonos avanzar y conocernos a nosotros mismos. Es muy ilustrativo el cuento del elefante encadenado de Jorge Bucay.
Poniendo en práctica el pensamiento positivo a través de diferentes tips:
1. La experiencia es la acumulación de errores.
2. No podemos cambiar al otro, sí podemos modificar la forma que tenemos de verle.
3. Debemos controlar nuestro diálogo interior. Nosotros mismos somos la persona con la que más hablamos a lo largo del día. Y solemos hablarnos mal cuando realmente deberíamos ser nuestros mayores fans. ¿Quién si no, va a serlo? ¡Medítenlo!
Aceptando el caos. La felicidad es la capacidad para gestionar problemas, no consiste en no tenerlos, ya que, eso es imposible. Son las dificultades las que nos hacen crecer porque a medida que las vamos resolviendo, vamos aprendiendo. Sin caos no hay evolución y, por tanto, no existe aprendizaje.
En todo caso, si lo que realmente quieren de verdad es aprender a vivir más felices, desde Diario Marín les recomendamos todos los libros de Juanma Quelle que son un verdadero éxito y que pueden adquirir AQUÍ.
Silvia Rodríguez Coladas es jurista, escritora y Directora de Sostenibilidad, Reciclaje, Bienestar y Eco-Tips by Silvia de Diario Marín.
