Un policía que se jubila
En la película Última noche en Milán de Andrea Di Stefano hay un policía que se jubila y es un poco pazguato. O pusilánime como le define una de sus amistades para justificar lo idóneo de su perfil como encargado de seguridad para unos dudosos clientes chinos. Y aún por encima se apellida Amore.
Además nos recuerda a otros detectives (Montalbano, nuestro Arrieta) irrelevantes físicamente, astutos y sagaces, capaces de labrarse una carrera y un respeto en la profesión sin apenas pegar un tiro ni ser candidato a ninguna insignia al arrojo.
Cuando Amore se encare con su destino y exija el pago por tanta abnegación, la historia se convertirá en un cruel desatino al que el espectador asistirá, tenso, a través de los ojos del detective, dueño, al fin, de su vida.

- Última noche en Milán (Andrea Di Stefano, 2023) se puede ver en Filmin
Leer a Virginia Woolf
Si a usted también le parece que este final literario de 2023 apenas ha dejado nada relevante, vuelva a los clásicos. O anímese a descubrirlos. Nunca es tarde. En ellos encontrará la modernidad absoluta, la arriesgada creatividad que supera cánones y academicismos para acabar permaneciendo.
En La señora Dalloway, por ejemplo. En Virginia Woolf.
En una sola jornada, Woolf esboza las vidas de un grupo de personas (el matrimonio Dalloway y su hija Elizabeth, Peter Welsh, Seamus W. Smith y su esposa Rezia, Doris Kilman…) en un vaivén frenético que atraviesa Londres en el verano de 1925.
Pero la autora no se limitará a ese esbozo. El frenesí londinense continuará en las mentes de todos los personajes, en las que Woolf entra para poner en palabras sus pensamientos; la condición humana en una galería de flaquezas, anhelos, alegrías e inquietudes, comunes a todos ellos. A nosotros también.
Es imposible que el lector no se identifique con cualquiera de ellos (la propia autora se transmuta en Seamus Warren Smith, como no, depresivos ambos). Por ello y por muchas más razones permanecen obras como las de Woolf por delante de tanta sobreabundancia, por atrevida y vanguardista y también por colocar nuestras miserias frente al espejo.

- La señora Dalloway (Virginia Woolf, 1925) se puede leer, por ejemplo, en la colección Austral Singular, en una edición conjunta con Una habitación propia
Leila Guerriero en busca de un fantasma
En este recién despedido 2023 la periodista argentina se instaló un tiempo en Cala Saniá, en la Costa Brava, para seguir durante unos meses el rastro de un fantasma. Del de Truman Capote, ni más ni menos. Y de sus indagaciones nace un reportaje periodístico, La dificultad del fantasma, que hubiese firmado el mismo perseguido.
Capote pasó varias temporadas en la Costa Brava entre 1960 y 1962 en busca de la calma necesaria para rematar la que sería su obra cumbre, A sangre fría.
La primera parte de esta frase es cierta, pese a que el paso del tiempo conserve únicamente dos o tres testigos y, en pie ninguno de los establecimientos donde se proveía de pasteles o alcohol.
La segunda es una suposición.
Poco le ha importado a este lector que Guerriero no alcance a saber si Capote organizaba inacabables noches de fiestas en terrazas a cuyos pies se mece el Mediterráneo, si suspiraba por volver a Nueva York a la espera de la resolución judicial del caso de los asesinos de Kansas o si sus paseos por Palamós fueron ciertos o la ridiculez de ciertas clases de turismo los ha convertido en leyenda.
Leer a Guerriero es encontrarse siempre con un relato periodístico ameno, que incluye lo propio sin interferir apenas en el tema del reportaje, con la facilidad absoluta de engarzar, dejar y volver, sin cansar nunca.

Solo hay una cosa que sea tan apasionante como leerla: escucharla hablar de lo que escribe.
- La dificultad del fantasma (Leila Guerriero, 2023) se puede descargar gratuitamente de la web de la Fundación Finestres
- El lector puede escuchar a Leila hablar del proceso de creación de esta obra con Javier Aznar en el número 811 del podcast Hotel Jorge Juan


